CARLOS MIGUEL HERRERA MOLPECERES
LICENCIADO EN DERECHO
CRISTÓBAL COLÓN
l pasado veinte de Mayo, se cumplieron cinco siglos, y cinco años, ¡capicúa!, de la muerte, en Valladolid, del legendario navegante genovés, Cristóbal Colón, descubridor de las Américas. El 3 de Agosto de 1492, del puerto de Palos (Huelva) salió una flotilla de barcos, –la Santa María, la Pinta y la Niña–, al mando del almirante Cristóbal Colón, con el objeto de descubrir nuevos territorios, las Indias –pensó que había llegado allí– e incorporarlos a la soberanía del reino de España, expedición muy arriesgada y no exenta de grandes peligros y financiada por los Reyes de España, los Católicos, Isabel y Fernando. Era el inicio del Siglo de Oro español, que tuvo una gran relevancia en las letras, ciencias, literatura, pintura, arquitectura y escultura, con grandes genios como Quevedo, Francisco de Vitoria, Góngora, Servet, Miguel de Cervantes y un largo etcétera de nombres y apellidos e identidades gloriosas para el renacimiento de España, nuestra amada Patria. Tras una travesía penosa, larga y llena de grandes dificultades, el 12 de Octubre de 1492, Día de la Hispanidad desde entonces, divisaron tierra, siendo la isla de San Salvador, como la llamaron, la primera en ser descubierta; luego vinieron Cuba y la República Dominicana dentro de esta primera expedición, marcando una nueva época, una época de esplendor para España y de nuevas oportunidades. Las grandes potencias europeas, Gran Bretaña, Portugal, Holanda y Francia, se lanzaron a una meteórica carrera por no quedarse atrás en la conquista de nuevos territorios en las Américas.

Nuevas y sucesivas expediciones, como la de Hernán Cortés o Francisco Pizarro, conquistaron México y El Perú; después llegaron Núñez de Balboa, Cabeza de Vaca, Ojeda, Orellana y un sinfín de conquistadores y aventureros que dejaron su legado, el legado de España en América Latina; como el castellano, el idioma de Cervantes, que es compartido por millones de personas, desde España a los países hermanos de América Latina, pasando por Guinea Ecuatorial, la Guinea española, en África.

Sin embargo, ciertos sectores y algunos dirigentes bolivarianos, de los países hermanos de América Latina, intentan desacreditar, continua y sistemáticamente, la obra de España en América y en el mundo, y su magno legado; con poca elegancia, en excesivas ocasiones, critican al Gran Almirante genovés, Cristóbal Colón, deleitándose con su Libertador, Simón Bolívar, como si hubiese sido, en su época, el rey de la bondad, de la justicia y de la igualdad, liberando a su pueblo de la opresión nazi española. ¡Qué imaginación! Parece como si los españoles, todos y cada uno de nosotros, deberíamos de pedir perdón, en nombre de Cristóbal Colón, por haber descubierto las Américas, magno pecado, según ellos.

Hablar de Cristóbal Colón es hablar de esa casta de hombres, de españoles que dieron su vida y todo su empeño por la grandeza de España a lo largo de muchos siglos. Un listado irrepetible de hombres, nombres y apellidos gloriosos para España y que no deben de quedar en el baúl del olvido: héroes como Gonzalo Fernández de Córdoba, el Gran Capitán, Alejandro Farnesio, Roger de Flor, Méndez Núñez, Churruca, el almirante Antonio Oquendo, Agustina de Aragón, Eloy Gonzalo, Joaquín Vara de Rey, Antonio Padrós Páges, José Millán-Astray, González Tablas, Agustín Muñoz-Grandes, González-Gallarza, Manuel Ruiz Huidobro, Joaquín García Morato, Pedro Molpeceres Escolar, Antonio Ponte Anido, Orlando Ces Casado, Mariano García Esteban, Asterio Herrera Bernal, Benito Alonso, Antonio Ortiz de Zárate, Francisco Fadrique, Juan Maderal Oleaga; y un largo etcétera de héroes, también, anónimos, que hicieron de España una nación grande y respetada en el mundo entero. ¡Viva España. Viva Siempre España!
CRISTÓBAL COLÓN
CARLOS MIGUEL HERRERA MOLPECERES
LICENCIADO EN DERECHO